Yo sé un himno gigante y extraño
que anuncia en la noche del alma una aurora,
y estas páginas son de ese himno
cadencias que el aire dilata en las sombras.
Yo quisiera escribirle, del hombre
domando el rebelde, mezquino idioma,
con palabras que fuesen a un tiempo
suspiros y risas, colores y notas.
Pero en vano es luchar, que no hay cifra
capaz de encerrarle; y apenas, ¡oh, hermosa!,
si, teniendo en mis manos las tuyas,
pudiera, al oído, cantártelo a solas.
6 comentarios:
jejee yo tambien me pido contarle a solas ese himno, no te digo, jajaja, además con el tema de Sirenia que está sonnando en estos momentos.
un abrazo compañero
Se me ha puesto el vello de punta....que hermosura, era muy grande Adolfo y lo sigue siendo en nuestros corazones...Batoosahi tienes un gusto exquisito...besosssss con mi cariño...
Pues hazlo, y con esa música de fondo...
Un abrazo amigo mio.
Amiga mia tenemos ambos muy buen gusto, jejejeje...
besos mil.
Que bonito cielo, jo lo que me esta costando escribir el mensaje, internet hoy me va fatal, escribo y el texto sale diez minutos despues grrrrrrrr
Siempre me ha gustado leer a Gustavo Adolfo Becquer
Besitos cielo y bella semana
Muchas gracias Adis por tu visita y tu comentario, se te echaba de menos.
No se si es tu internet o es el blog, pero me ocurre lo mismo a veces, intenteré probar una cosa a ver si funciona.
Mil besos.
Publicar un comentario