jueves, 23 de mayo de 2013

PERDIDO, DE ELIZABETH ELEANOR SIDDAL.


Tocar el guante sobre su mano suave,
mirar la joya brillando en su anillo,
elevó mi corazón hacia un castillo
como la súbita canción de las aves.

Tocar su sombra sobre la hierba soleada,
quebrando su camino por el bosque oscuro,
llenó mi vida con un tembloroso orgullo,
lágrimas silenciosas en la tarde agotada.

Observé a las sombras reunirse en el olvido,
y sólo vivo para saber que la he perdido,
pues se ha ido, perdida eternamente sin marcas,
como la tierna paloma que abandonó el arca.

lunes, 20 de mayo de 2013

UN EPITAFIO, DE ALFRED EDWARD HOUSMAN.


Quédate, si lo deseas, o sigue tu camino.
La Noche se acerca,
y refugio debes encontrar.
Nunca suspiro, ni me ruborizo;
nunca la tribulación adorna mi frente.
Nunca me lamento al pensar
si Dios al crearme sintió pesar.
Aquí, todas las fiebres yacen bajo
el mismo bálsamo,
y rodeado de aquel antiguo mal, duermo.
Mis sueños ya no tienen sonido.

jueves, 16 de mayo de 2013

UN RETRATO, DE CHRISTINA GEORGINA ROSSETTI.


Ella renunció a su belleza en la tierna juventud,
renunció a la esperanza, a los alegres modales;
ella veló sus ojos ante la prohibida vanidad,
y eligió lo más amargo de la verdad.
Dura consigo misma, y hacia los demás con piedad,
sirvienta de sirvientes, pocas certezas para alabar,
largas oraciones y ayunos en la eremita, noche y día:
Ella se instruyó sobre visiones y sonidos groseros,
ya que con pobres debía habitar, con asolados obreros,
hasta que lo más ínfimo de todo lo hecho
sea satisfecho: Ella misma renunciando a su ser,
contando los bienes terrenales con dolor.
Entonces, con la calma de su elección, cargó la cruz
y odió al mundo por amor a Dios.

Ellos se arrodillaron en angustioso silencio junto a su cama,
no podía llorar; pero en calma allí reposaba.
Todo el dolor la había abandonado, y el último rayo de sol
brilló a través de ella, tiñendo de rojo las sombrías cortinas.
En su corazón, Ella dijo:
El Cielo se abre; dejo el mundo y marcho lejos,
el Novio me convoca ¿la Novia se rehusará?
Luego, sobre el pecho inclinó su cabeza.
Oh Lirio, gema de inestimable valor,
oh paloma de paciente mirada y tierna voz,
oh vid fecunda entre la tierra yerma,
oh doncella llena de amor y pureza,
inclina ante tus amigos terrenales la cabeza,
para elevarte con los santos en el Paraíso.

martes, 14 de mayo de 2013

AMOR COMPLETO, DE WILLIAM MORRIS.


¿Has anhelado, a través de los cansados días,
la visión fugaz del rostro amado?
¿Has clamado por un instante de paz
en medio del dolor de las penosas horas?
¿Has rogado por el sueño y la muerte,
cuando el dulce e inesperado consuelo
fue sólo sombras y aliento?
Hace mucho, demasiado, que el miedo no disminuye
sobre estas ilusorias y reptantes flores.
Ahora descansa: pues aún en el reposo
podrás conservar todos tus anhelos.

Debes descansar y no temer
al acechante y sordo despertar
de una vida que transcurre a ciegas;
llena de desperdicios y penas.
Debes despertar y pensar en lo dulce
que es tu amor, en su íntimo ardor.
Será más dulce para los labios que conocerás,
más dulce de lo que tu corazón intenta ocultar:
Anhelos absolutos e insatisfechos.
La respuesta a todas las esperanzas
se cierran sobre tí, muy cerca.

Recordarás los antiguos besos,
y aún el frío dolor que crecía.
Recordarás aquella poderosa dicha,
y aún los ojos y las manos perdidas.
Recordarás todo el remordimiento
por lo escasos que fueron sus besos,
el sueño perdido de cómo se conocieron
es el sabor a miseria en tus labios marchitos.
Entonces parecía Amor, pero nacido para morir,
el Hoy es inquietud, dolor:
La bendición es el olvido, el silencio;
mi Amor es solitario, más nunca será un secreto.

domingo, 12 de mayo de 2013

DESMAYARSE, ATREVERSE, ESTAR FURIOSO..., DE LOPE DE VEGA.


 Desmayarse, atreverse, estar furioso,
áspero, tierno, liberal, esquivo,
alentado, mortal, difunto, vivo,
leal, traidor, cobarde y animoso;

no hallar fuera del bien centro y reposo,
mostrarse alegre, triste, humilde, altivo,
enojado, valiente, fugitivo,
satisfecho, ofendido, receloso;

huir el rostro al claro desengaño,
beber veneno por licor suave,
olvidar el provecho, amar el daño;

creer que un cielo en un infierno cabe,
dar la vida y el alma a un desengaño;
esto es amor, quien lo probó lo sabe.

miércoles, 8 de mayo de 2013

A LA MUSA, DE ALEXANDER BLOK.


Hay en tus melodías escondidas
de nuestro fin la noticia fatal.
Llevas la maldición de Dios, y llevas
la profanación de la felicidad.

Hay en ti una fuerza tan fascinante
que me apresto a acusarte yo también
de perder a los seres candorosos
seduciéndolos con tu esplendidez.

Cuando te burlas de la fe sagrada
de golpe veo encenderse en ti
una corona que ya he visto antes,
sin forma clara, purpurina y gris.

¿Es del Bien o del Mal? Eres misteriosa,
y de mil modos se habla de ti:
Musa y Milagro eres para unos;
Infierno y Dolor eres para mí.

¿Por qué no he perecido en la mañana,
cuando el insomnio se llevó el vigor,
y en cambio al entrever tu rostro frío,
consuelos suplicaba a tu favor?

Desearía que fueses mi enemiga.
Pero, ¿por qué me brindaste el presente
de las flores, el cielo, las estrellas
y la maldición de tus bellas fuentes?

Más pérfidas que las noches del Norte,
más embriagantes que el vino de Aí,
más breves que el amor de las gitanas,
fueron tus viles besos para mí.

En el violar las cosas más sagradas
tuve una maligna satisfacción,
y en tus amores, como la hiel amargos,
locas delicias tuvo el corazón.

lunes, 6 de mayo de 2013

UN SUEÑO DENTRO DE UN SUEÑO, DE EDGAR ALLAN POE.


¡Toma este beso sobre tu frente!
y, me despido de ti ahora,
no queda nada por confesar.
No se equivoca quien estima
que mis días han sido un sueño;
aún si la esperanza ha volado
en una noche, o en un día,
en una visión, o en ninguna,
¿es por ello menor la partida?
Todo lo que vemos o imaginamos
es sólo un sueño dentro de un sueño.

Me paro entre el bramido
de una costa atormentada por las olas,
y sostengo en mi mano
granos de la dorada arena.
¡Qué pocos! Sin embargo como se arrastran
entre mis dedos hacia lo profundo,
mientras lloro, ¡mientras lloro!
¡Oh, Dios! ¿No puedo aferrarlos
con más fuerza?
¡Oh, Dios! ¿No puedo salvar
uno de la implacable marea?
¿Es todo lo que vemos o imaginamos
un sueño dentro de un sueño?

sábado, 4 de mayo de 2013

MÁS ALLÁ DEL OLVIDO, DE ALEJANDRA PIZARNIK.


 
Alguna vez de un costado de la luna
verás caer los besos que brillan en mí
las sombras sonreirán altivas
luciendo el secreto que gime vagando
vendrán las hojas impávidas que
algún día fueron lo que mis ojos
vendrán las mustias fragancias que
innatas descendieron del alado son
vendrán las rojas alegrías que
burbujean intensas en el sol que
redondea las armonías equidistantes en
el humo danzante de la pipa de mi amor.

jueves, 2 de mayo de 2013

PLACER, DE CHARLOTTE BRONTË.


El Placer verdadero no se respira en la ciudad,
ni en los templos donde el Arte habita,
tampoco en palacios y torres donde
la voz de la grandeza se agita.

No. Busca dónde la alta naturaleza sostiene
su corte entre majestuosas arboledas,
donde ella desata todas sus riquezas,
moviéndose en fresca belleza;

dónde miles de aves con las más dulces voces,
dónde brama la salvaje tormenta
y miles de arroyos se deslizan suaves,
allí se forma su concierto poderoso.

Ve hacia donde el bosque envuelto sueña,
bañado por la pálida luz de la luna,
hacia la bóveda de ramas que acunan
los sonidos huecos de la noche.

Ve hacia donde el inspirado ruiseñor
arranca vibraciones con su canción,
hasta que todo el solitario y quieto valle
suene como una sinfonía circular.

Ve, siéntate en una saliente de la montaña
y mira el mundo a tu alrededor;
las colinas y las hondonadas,
el sonido de las quebradas,
el lejano horizonte atado.

Luego mira el amplio cielo sobre tu cabeza,
la inmóvil, profunda bóveda de azul,
el sol que arroja sus rayos dorados,
las nubes como perlas de azur.

Y mientras tu mirada se pose en esta vasta escena
tus pensamientos ciertamente viajarán lejos,
aunque ignotos años deberían atravesar entre
los veloces y fugaces momentos del Tiempo.

Hacia la edad dónde la Tierra era joven,
cuando los padres, grises y viejos,
alabaron a su Dios con una canción,
escuchando en silencio su misericordia.

Los verás con sus barbas de nieve,
con ropas de amplias formas,
sus vidas pacíficas, flotando gentilmente,
rara vez sintieron la pasión de la tormenta.

Luego un tranquilo, solemne placer penetrará
en lo más íntimo de tu mente;
en esa delicada aura tu espíritu sentirá
una nueva y silenciosa suavidad.