miércoles, 30 de octubre de 2013

domingo, 27 de octubre de 2013

DOY LAS GRACIAS A TODOS, DE ELIZABETH BARRET BROWNING.


Doy las gracias a todos los que me han amado en sus corazones,
con las gracias y el amor que hay en el mío. Profundas gracias a todos
los que se han demorado en los muros de esta prisión
para escuchar mi música en sus más intenso dolor,
flotando siempre hacia adelante, llenando el espacio
del pagano templo, más allá de las palabras.
Tu, quien te hundes y caes en mi voz
cuando la pena te arrebata, el divino instrumento
del arte se despliega ante tus pies
para escuchar lo que he dicho entre lágrimas,
enséñame cómo agradecerte. Enséñame como
ver el sentido de mi vida en los años futuros,
y a sentir que el amor perdura en la vida que se desvanece.

jueves, 24 de octubre de 2013

MANOLO ESCOBAR...

HA FALLECIDO MANOLO ESCOBAR, UNO DE LOS MEJORES CANTANTES DE ESPAÑA, Y EL MAS ILUSTRE DE LOS ALMERIENSES.

DESCANSE EN PAZ.


Ya sé que no es del estilo de música que suelo publicar, pero era el cantante preferido de mi abuela y el de mi madre, y mi abuelo lo conoció cuando era un chiquillo.
Y he querido rendirle este humilde homenaje.

miércoles, 23 de octubre de 2013

AMOR PROFANUS, DE ERNEST CHRISTOPHER DOWSON.


Más allá de la pálida memoria,
en algún misterioso bosque oscuro;
existe un lugar hecho de sombras,
silencioso bajo la bóveda de árboles,
un lugar olvidado por el sol:
He soñado que allí nos reuníamos
para maravillarnos de nuestro antiguo amor.

Reunidos allí por casualidad, largos años habían pasado,
hemos vagado por la espesura sombría;
y aquel antiguo lenguaje del corazón
intentamos en vano evocar: ¡Oh, que melodía furtiva!
Sobre nuestros pálidos labios han corrido
las aguas del olvido,
que corona el amor de todos los mortales.

En vano balbuceamos; desde lejos,
nuestro viejo deseo brilló frío y muerto:
Esa vez fue lejano como una estrella,
cuando los ojos alumbraban y los labios eran carmesí.
Sin embargo fuimos con los ojos abatidos,
sin encontrar placer en la cercanía,
como dos pobres sombras desconsoladas.

¡Oh, Amor! Mientras la vida es nuestra,
no acumules las bellezas rosas y blancas,
pero arranca la hermosura que huye de las flores
para que adornen nuestro pequeño sendero de luz:
Pues pronto habremos de ahogarnos
en la amarga hierba de los muertos.
Separados, tristes espectros de la noche.

viernes, 18 de octubre de 2013

LA VENTANA, DE HENRY VAN DYKE.

 

Toda la noche, por una distante campana,
las horas fueron pasando en la oscuridad,
mientras los suspiros de ella se elevaron y cayeron,
y el destello de vida que en su rostro se veía,
parecía brillar o desvanecerse ¿Quién podría decirlo?
La ventana abierta en la habitación,
con un fuego de luz dorada,
en las sombras fue hundiéndose,
como un ojo escrutando la Noche.

¿Qué ves en la Oscuridad, pequeña ventana, y porqué temes?

Veo al jardín cubierto por las formas del miedo. Frágiles y pálidos fantasmas bajo los árboles, balanceándose en el frío aliento nocturno, Y bajo la frondosa sombra del laurel, la figura de la Muerte.

Las dulces, claras notas del ave vespertina,
nos hablaron del paso de la Oscuridad;
tal vez mi amor las haya oído,
pues en sueños pareció sonreír,
mientras el rayo del naciente amanecer
habló de esperanza sin palabras,
hasta que el esplendor del este palideció
la luz de la lámpara, ahogándola;
y la ventana abierta lentamente giró
hacia el interior, desde el ojo de la mañana.

¿Qué ves en el cuarto, pequeña ventana, que hace que brilles majestuosa?

Veo que la niña duerme sobre la almohada, suave y blanca, con el rosa de la vida sobre los labios, y el aliento vital sobre el pecho, y los brazos de Dios sobre ella, mientras plácidamente descansa.

miércoles, 16 de octubre de 2013

DE PROFUNDIS, DE CHRISTINA GEORGINA ROSSETTI.


¿Por qué el cielo se alza distante?
¿Por qué la tierra cuelga lejana?
Ajena tiembla la estrella,
brillando opaca, constante.

No me importa alcanzar la luna,
un círculo de monótona sinfonía;
repitiendo incansable la misma melodía,
lejos de mi, de mi ternura.

Yo nunca contemplo el fuego disperso
de las estrellas, o del sol su ardiente sendero,
todo mi corazón conjuga un solo deseo,
un vano sentimiento reseco.

Pues atada yazgo bajo la trémula lanza,
alegría, belleza, danzan lejos de mi alcance,
comprimo mi corazón, estiro mi romance,
y temblorosa acaricio la esperanza.

lunes, 14 de octubre de 2013

DULCIS MEMORIA, DE HENRY VAN DYKE.


Hace mucho, mucho tiempo, escuché una canción,
(¿fue hace mucho o sólo ayer?)
suaves heridas se abrieron ante su melodía,
descendiendo profundo hacia mi corazón.
Una canción de entrañable consuelo;
que desde entonces me acompaña
en las horas más calmas y silenciosas,
como un agudo, dulce sonido que nunca morirá.

Hace mucho, mucho tiempo, vi una pequeña flor,
(¿fue hace mucho o sólo ayer?)
tan hermosa en su fragancia de largas horas,
que parecía querer revelarme sus secretos:
Un pensamiento de alegría brotó en su ser
sin jamás pronunciar palabra; y ahora, a menudo veo
que esa amigable, tierna flor, ya nunca se marchitará.

Hace mucho, mucho tiempo, tuvimos un niño pequeño,
(¿sucedió hace mucho o sólo ayer?)
hacia los ojos de su madre, y los míos, él sonrió
toda su corriente de inconsciente amor,
y cobijado en nuestros brazos, así durmió.
¡Un ángel convocado! No pudimos retenerlo;
sin embargo, nuestros brazos en secreto
continuaron acunándolo.
Nuestro niño pequeño ya nunca desaparecerá.

¿Hace mucho, mucho tiempo? ¡Ah, memoria, aclárate¡
(no fue hace mucho, sino ayer)
tan pequeña, indefensa y amada,
no dejes que la canción muera, que la flor se marchite.
Su voz, sus ojos al despertar, su gentil reposar:
Las pequeñas cosas están a salvo en tu memoria;
permite que nuestro ángel habita allí, para siempre.

miércoles, 9 de octubre de 2013

ALGÚN DÍA NOS AMAMOS, DE ROBERT LOUIS STEVENSON.


"Entre la espesura de bayas y las islas de juncos, como a través de un mundo que sólo fuera cielo, oh firmamento invertido, la barca de nuestro amor se deslizaba. Brillantes como el día eran tus ojos, radiante fluía la corriente y era radiante el vasto y eterno cielo.
Cuando murió la gloria en el dorado crepúsculo, resplandeciente ascendió la luna, y llenos de flores al hogar regresamos. Radiantes fueron tus ojos esa noche, habíamos vivido, oh amor...Oh amor mío, habíamos amado.
Ahora el hielo envuelve nuestro río, con su blancura cubre la nieve nuestra isla, y junto a la lumbre invernal Joan y Darby dormitan y sueñan. Sin embargo, en el sueño, fluye el río y la barca del amor aún se desliza...
Escucha el sonido del remo al cortar sus aguas. Y en las tardes de invierno cuando la fantasía sueña en el crepitar de la chimenea, en sus oídos de viejos enamorados el río de su amor canta en los juncos.
Oh amor mío, ama el pasado...
pues algún día fuimos felices...
y algún día nos amamos. "

lunes, 7 de octubre de 2013

A SU AMADA, DE ROBERT HERRICK.


Dices que no te amo
porque ya no juego con tus rizos,
ni me paso el tiempo besándote;
también me reprochas que no invento
un juego para las niñas de tus ojos.
Juro por la religión del amor:
Cuando menos lo digo, más amo.
Solo los dolores leves pueden expresarse,
se sabe que los barriles llenos no hacen ruido.
Las aguas profundas son silenciosas,
las corrientes ruidosas no tienen hondura.
Por eso, cuando el amor es mudo
expresa una profundidad
y esa profundidad es infinita.
Y ya que mi amor es tácito,
comprenderás que hablo poco
porque amo demasiado.

viernes, 4 de octubre de 2013

DESCRIPCIÓN DE LA PERFECTA BELLEZA, DE CHRISTIAN HOFMANN VON HOFMANNSWALDAU.


Un cabello que temerario a Berenice esquiva,
una boca que exhibe rosas, plena de perlas,
una lengua que emponzoña mil corazones,
dos senos, donde el rubí alabastro tramaría.

Un cuello que en todo aventaja al cisne,
dos mejillas, donde la majestad de Flora se agita,
una mirada que derriba hombres, que convoca rayos,
dos brazos, cuya fuerza al león han ejecutado.

Un corazón, del cuál no brota más que mi ruina,
una voz, tan celestial que mi condena sentencia,
dos manos, cuyo rencor al destierro me envían,
y con dulce veneno la misma alma envuelve
un adorno, así parece, en Paraíso creado,
de todo ingenio y libertad me ha privado.