Y en las horas más ruidosas de la razón,
todavía existe un incesante susurro: Te amo;
único consuelo y soliloquio del corazón.
Tu moldeas mi esperanza, vestida en mi interior;
liderando todas mis palpitaciones, fluyendo en mi dolor.
Tu yaces en mis muchos pensamientos, como la luz,
como la dulce luz del crepúsculo,
o la visión anticipada del verano rompiendo en el arroyo,
nubes reflejadas en un lago.
Y mirando hacia el cielo que se arquea sobre ti,
muy a menudo, bendigo al dios que me ha hecho amarte así.
3 comentarios:
El amor siempre está `presente en nuestra vida, de una u otra forma. A veces nos lleva tan altos como el corazón de un aguila en pleno vuelo, jeje ala ya me he pasao, jajaja
Venga amigo un abrazo y buen finde
mientras que no nos deje caer desde tan alto, jejejeje.
Buen fin de semana amigo.
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