viernes, 8 de junio de 2012

NUNCA DIJIMOS ADIÓS, DE MARY ELIZABETH COLERIDGE.


Nunca dijimos adiós, ni siquiera
nos regalamos una última mirada,
no hubo signos en la cadena helada
cuando fue rota, cuando desatados descendimos.

Y aquí descansamos juntos, eternamente, lado a lado;
nuestro hogar fijado de por vida sobre el mármol.
Dos islas que los rugientes océanos
ya no podrán separar.

4 comentarios:

Luján Fraix dijo...

QUE PRECIOSO POEMA, MUY SENTIDO Y PROFUNDO.
EL AMOR MÁS ALLÁ DE TODO.

LA PINTURA ES MUY BELLA.
UN BESITO

BATOOSAHI dijo...

Un gran poema,,, muy hermoso.
Gracias por visitar mi Rincón Luján,,,, besos.

sabores compartidos dijo...

El amor casi siempre está por encima de todas las cosas de la vida y por ello deberiamos regirnos, pero......
la imagen esta mazo guapa.
un abrazo amigo

BATOOSAHI dijo...

pero...????
Gracias por visitarme siempre,,, un gran abrazo amigo mio.